Al final de la temporada 1928-29, se homenajeó a Patricio Caicedo, quien se convirtió durante muchos años en el entrenador del equipo, mientras que en contraposición de las alegrías, hubo que lamentar el traspaso de Zamora al Real Madrid Club de Fútbol en el año 1930 por la cifra récord de 100 000 pesetas de la época, tras haber sido la más destacada figura del plantel durante la década.